En El Instinto de La Lengua, el experto de la lengua, Steven Pinkus, dice (p. 26), "ninguna tribu muda se ha descubierto siempre, y no hay expediente que una región ha servido como una 'horquilla' de la lengua de la cual se separó a los grupos previamente languageless."El discurso de la riqueza de la variabilidad de la lengua, Pinkus dice (p. 28), "Él es incluso un pedacito que engaña a para llamar inglés estándar una 'lengua' y estas variaciones 'dialectos', como si hubiera una cierta diferencia significativo entre él. La mejor definición viene del lingüista Weinreich máximo: Una lengua es un dialecto con un ejército y una marina."
Y Pinkus cuenta una historia fascinadora sobre las creaciones de una lengua (p. 36): "Hasta hace poco tiempo no había idiomas de la muestra en Nicaragua porque su gente sorda seguía aislada a partir de la una otra. Cuando el goverment de Sandanista asumió el control en 1979 y reformó el sistema educativo, las primeras escuelas para el sordo fueron creadas. La escuela centrada en perforar a los niños en la lectura y el discurso del labio, y como en cada caso donde eso se intenta los resultados era triste. Pero no importó. En los patios y los schoolbuses los niños inventaban su propio sistema de la muestra, reuniendo los gestos de expediente que utilizaron con sus familias en el país. Después de poco tiempo el sistema congeló en qué ahora se llama el Linguaje de Signos Nicaragüene (LSN). LSN es utilizado hoy con grados varyiing de fluidez, por los adultos sordos jóvenes, a partir el diecisiete a veinticinco, que lo desarrollaron cuando él era diez o más viejo."
Vía lengua puse mis pensamientos en su cerebro. Vía lengua irradio el arco iris de mi humanidad. Sin lengua escrita, debo hacer esta cara para hacer frente. Y ni unos ni otros de nosotros tienen tiempo para eso. Y, iguale si es posible, él sería una cosa de una sola vez. Mi instrucción permite que cuelgue hacia fuera mis pensamientos con "a-quien-e'l-poder-trata" de la muestra en ellos. Su instrucción permite que usted mordisque en su ocio y que repita siempre que le satisfaga.
Mis pensamientos podían adquirir una "inmotalidad" más allá de mi ocupación.
He dicho a menudo a mis estudiantes, "A menos que usted done algo escrito a la posteridad, cómo puede saber usted vivió una vez sobre esta tierra?"
La lengua nos hace humanos. La instrucción irradia esa humanidad -- con espacio y tiempo.